Buscar este blog

sábado, 29 de octubre de 2016

Primer quinquenio de bloguero



 Paco Rallo, fotografía de Cristina Marín Chaves



Mi primer quinquenio de bloguero.

Han pasado cinco años desde que decidí poner en marcha este blog. A partir de entonces se ha engrosado con 167 entradas de mis trabajos de arte, diseño o de editor, además de textos personales o de otros autores que se refieren a mis actividades profesionales. Alcanzando 53.045 vistas cuando publico esta entrada y teniendo 50 seguidores que sean registrados personalmente.

Los países que más me visitan con las siguientes entadas son: España con 25.111; Estados Unidos con 7.640; Alemania con 4.560; Rusia con 1.836; México con 1.265; China con 1.103; Francia con 1.034; Ucrania con 750; Reino Unido con 671; Colombia con 425 y un sinfín de visitas de todas las partes del mundo. Con tan solo 23 comentarios dejados.

Todos estos datos me sirven de excusa para escribir unas reflexiones al celebrar mi primer quinquenio de bloguero. Toda actividad nueva conlleva una cierta incertidumbre al desconocer el alcance que pueda tener o el interés que pueda despertar, e incluso su repercusión tanto social como profesional. Ahora puedo decir que no me puedo quejar de las visitas que recibe mi blog, más aun pensando que este año no le he dedicado mucha atención y los registros siguen sumando.

Lo que más me sorprende de todas estas visitas, son los pocos comentarios que recibo e incluso que no haya tenido ninguna invitación o propuesta para participar en algún proyecto, dentro de mis actividades profesionales. Por esto he introducido un par de cambios en el blog para que podáis dar vuestra opinión e incluso contactarme.

Seguiré publicando sin pedir permiso más que a mí mismo, en este escaparate global y que los azares de la vida se manifiesten, si lo consideran oportuno.

Gracias desde mi corazón, a todos los que me visitáis. Paco Rallo 

1 comentario:

  1. En nuestra Vida como en el Universo hay un Tiempo para cada cosa, y cuando ella tiene sustancia, duende y Arte, termina por imponerse.
    Con mis mejores deseos, un abrazo.

    ResponderEliminar